domingo, 13 de julio de 2014

EL ALBAÑIL

Un maestro albañil, ya entrado en años estaba listo para retirarse.
Le dijo a su jefe de sus planes de dejar el negocio de la construcción para llevar una vida más placentera con su esposa y disfrutar de su familia.
Iba a extrañar su cheque semanal, pero necesitaba retirarse porque se sentía cansado y sin fuerzas para continuar con el duro trabajo.
Su familia conociendo que el albañil ya estaba cansado, le dijeron que no se preocupe tanto, que ellos superarían esta etapa de alguna manera. Total, así lo hicieron cuando cayó enfermo una vez y tuvieron que hacer malabares para poder pagar el médico, las medicinas, y los gastos del hogar.
El jefe sentía mucho ver que su buen empleado dejaba la compañía y le pidió que construyera una cosa más, como un favor personal.
El albañil accedió, pero se veía fácilmente que no estaba poniendo el corazón en su labor como lo hizo anteriormente con los trabajos que hizo a lo largo de su paso por la compañía.
El albañil utilizaba materiales de inferior calidad y el trabajo era deficiente. Era una desafortunada manera de terminar decía para sí:
-      Toda mi vida he trabajado. Y ahora mi jefe quiere seguir ganando a costas mías.
Cuando el albañil terminó su trabajo y su jefe fue a inspeccionar la casa, el jefe le extendió las llaves de la puerta principal.
-    Esta es tu casa, un regalo para ti. – dijo el jefe, quien de esta manera le agradecía por el apoyo de estos años en donde trabajó sin descanso para el
¡Qué tragedia! Si solamente el albañil hubiese sabido que estaba construyendo su propia casa, lo hubiera hecho de manera diferente. Ahora tendría que vivir en la casa que construyó, no muy bien que digamos.
¿Tenemos idea que con cada cosa que hacemos estamos construyendo nuestra vida? ¿Qué tendremos que habilitar en ella?
¿Somos conscientes  de que la cosa que hoy tiene nuestra vida, aún aquellos que no nos gustan, son aquellas que construimos en el pasado?
Estamos viviendo en la casa que nosotros mismos hemos construido. Todos los días agregamos una pared, un clavo, un mueble.
Algunas cosas serán mas fáciles de modificar que otras,
Pensemos como albañiles de nuestra vida.
Cada día clavamos un clavo, levantamos una pared o edificamos un techo.
Nuestra vida ahora es el resultado de las actitudes y elecciones del pasado.
Tenemos la posibilidad de elegir  las cosas que formarán parte de nuestro mundo. Mientras estemos con vida, todas las posibilidades nos pertenecen. 

1. ¿Por qué el albañil quiso renunciar?
2. ¿Crees que si el albañil sabía que el favor que le mando hacer su jefe era para él, lo hubiera hecho igual y con la misma intensidad con que la hizo?
3. ¿Qué nos quiere dar a entender el autor con esta lectura?
4. ¿Cómo y con qué materiales estas construyendo tu futuro?

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