lunes, 22 de septiembre de 2014

Actividad 4

La película que está conmocionando al mundo se llama TheDarkKnight (El caballero de la noche). No solo por su calidad —algunos críticos ya la consideran una de las mejores películas de superhéroes de todos los tiempos—, sino por todo el misterio que la rodea. Y, por supuesto, por la interpretación "póstuma" del actor australiano HeathLedger, quien murió repentinamente en enero pasado a causa de una sobredosis accidental de medicamentos, ya concluida la filmación de la película. Ledger le da vida a una criatura espeluznante, a un villano memorable: el Joker. En medio de la histeria que ha generado este estreno, muchos consideran su actuación digna del premio Oscar. Quízá sea un poco prematuro, pero no cabe duda de que Ledger es alma de la cinta y qúe su criatura es uno de los mejores villanos que han aparecido en la pantalla en mucho tiempo. El director de la película, Christopher Nolan —también director de Batman Begins, la primera parte de esta nueva serie de películas de Batman— describe el acercamiento de Ledger al personaje de Joker (una variante de aquel interpretado por Jack Nicholson en Batman de Tim Burton, en 1989), como "un recorrido salvaje y desencadenado, desvinculado de cualquier temor o inhibición, un espectáculo dentro del espectáculo". Nolan lo decía durante el rodaje de la película de la Warner Bros, en Chicago, el verano pasado, cuando Ledger aún vivía.

Entonces la película estaba alejada de esos tonos exagerados de elegía fúnebre. Ledger mismo, unas semanas después, había declarado a algunos periodistas: "Me he metido a tal grado en el papel de Joker y en su locura homicida que no logro quitármelo de encima, como si estuviera poseído por él. Joker me tiene despierto durante la noche; es el payaso degenerado que carcome el alma y las entrañas". Joker, con esa máscara macabra creada con un cargado maquillaje prácticamente rociado en el rostro de Ledger, como si fuera un lienzo de Jackson Pollock, realmente podría haberle costado la vida: la autopsia realizada al cuerpo del joven de 28 años que protagonizó Brokeback Mountain reveló como causa del deceso una sobredosis de antidepresivos, analgésicos y somníferos. La muerte sorprendió a Ledger en su piso de Soho, en Nueva York, el 22 de enero pasado, durante una pausa en el rodaje de la película de Terry Gilliarn en la que participaba, TheImaginarium of Doctor Parnassus (producción luego suspendida de manera indefinida).

1. Se infiere del texto:
A. Ledger es uno de los motivos para ver TheDarkKnight.
B. Ledger se suicidó debido a una crisis depresiva generada por su actuación en TheDarkKnight.
C. Según Nolan, su película es la mejor sobre superhéroes que se ha hecho jamás.
D. Ledger pudo terminar de filmar una última película antes de morir.

2. Señale la opción que se puede colegir:
I. Determinar la calidad de la cinta mencionada es difícil sin pensar en el Joker.
II. La actuación de Ledger es mucho mejor que la de Nicholson haciendo del Joker.'
III. Se pueden entregar Óscares de manera póstuma.
A. Solo I y II          C. Solo III
B. Solo II                D. Solo I y III

3. Señale el mejor título para el texto:

A. The Dark Khight y los posibles premios que recibiría
B. La extraña muerte de Heath Ledger durante el rodaje de su última película
C. Posibles causas de la muerte de Ledger y su manera de abordar un papel
D. Ledger, su notable interpretación del Joker y algunos detalles de su muerte

Actividad 3

Hace años frecuenté a dos chicas de las minorías sexuales, además de bailarinas eróticas y pareja sentimental. Desarrollé una excelente relación intelectual y personal con ellas. Aunque desde entonces me despertó curiosidad, no me atreví a explorar el mundo de donde obtenían el sustento.
Mucho tiempo después me encontré en una situación financiera extrema, al igual que Susana, el personaje de la historia de el libro Susana: memorias del table dance. Como ella, yo amo la danza y he practicado diferentes tipos de baile a lo largo de la vida. Empecé a suponer que bailar en un club no me sería difícil. Además, pensaba yo, me daría la oportunidad de realizar un reportaje desde el interior de un mundo prohibido e inaccesible del cual todo mundo habla, menos sus protagonistas.

Había una gran ingenuidad en mí: no imaginaba lo duro que me resultaría. Tanto, que tardé más de dos años en escribir la historia, después de que la aventura había terminado. Inicié varias veces; concluí un primer borrador, me detuve durante meses, volví a empezar, y no pude llevar la tarea a término sino hasta después de haber abierto plenamente las compuertas del miedo, de la rabia, de la risa. Porque para sobrevivir a ese mundo tuve que anestesiarme emocionalmente, y recordarme constantemente que yo -además de bailarina como Susana, la del libro- en realidad era periodista. Así logré mantener los ojos y los oídos abiertos en los clubes donde trabajé y durante las conversaciones que sostuve con decenas de chicas en diferentes ciudades. Así logré tomar notas y filmar algunas escenas. Pero para poder contar lo que vi y viví a lo largo de esos meses y dejarlo atrás, tuve que desandar esa "segura” distancia.

Al sumergirme en ese ambiente descubrí que, a pesar de ser las únicas que cargan con el estigma moral, son las chicas quienes, con su trabajo, dan de comer a muchas familias: las de los dueños y administradores de los antros, las de los meseros, taxistas, boleteras, estilistas, vendedores de ropa, productores y distribuidores de alcohol y drogas, policías e incluso algunas autoridades.

1. Se puede afirmar:
A. La autora del texto tuvo que trabajar de bailarina desnudista para escribir un libro sobre ello.
B. El trabajo de table dance fue en realidad más sencillo de lo que la autora pensaba.
C. Las chicas que trabajan en un table dance lo hacen por desesperación.
D. La autora del texto había practicado estilos de baile antes.

2. Se deduce del texto:
I. La autora tuvo que cambiar de opinión sobre el trabajo de tabla dance.
II. El trabajo de table dance no tiene una paga desdeñable.
III. Los moralistas no verían bien a las bailarinas de table dance.
A Solo I y II              C. Solo I
B. Solo II y III          D. Todas

3. Señale el título del texto:
A. La vida y dificultades del trabajo de bailarina nudista
B. Dificultades de una bailarina de table dance
C. Breve testimonio de la entrada al mundo del table dance
D. La extraña vida de Susana, la bailarina nudista

4. EXTREMA significa en el texto:
A. Exagerada            C. Extraña
B. Oculta                  D. Crítica

Actividad 2

Juan: Sé que mi hijo ya tiene 22 años y que no puedo seguir todo lo que hace, pero en verdad tuve toda la razón del mundo al llamarle la atención el día de ayer. El salió con su novia y volvió a casa a las tres de la mañana.
Es un adulto y ya trabaja, pero él no puede irse y pretender que nadie va a preocuparse si pasa la medianoche y no ha dado señales. Vive en mi casa y aún tiene que obedecer mis reglas. Si se va, puede regresar a la hora que desee, pero debe tener la delicadeza de comunicarse conmigo o con su madre para saber a qué hora regresará. No es justo que me haya tenido en vela toda la noche, temiendo lo peor.
Bertha: Tú mismo lo has dicho, tiene 22 años. Es absurdo que te hayas quedado en vela esperándolo, solo te hubieras ido a dormir. Tu hijo ya es un hombre y debes confiar en que sabe cuidarse y ha aprendido una que otra cosa en la calle. Entiende, ya va siendo hora de que sueltes un poco las riendas con él y que te saqueé de la cabeza esa imagen de muchacho pequeño que se te ha quedado, en cualquier momento decide irse de casa y empezar una vida con su novia. Llamarle la atención estaba bien cuando era un imberbe de 16, ahora no.

1. Señale la opción que debilitaría a Juan:
A) Su hijo dijo que volvería tarde al salir de casa y que estaría en casa de su novia, ya que era el cumpleaños de ella y quería celebrar.
B) Su hijo estuvo llamando al celular de su padre para decir que llegaría a las tres, pero este lo tenía apagado, por otro lado, el teléfono de la casa estaba mal colgado.
C) Su hijo en un muchacho trabajador que merece divertirse. Si llego tarde y ebrio, no es ya labor del padre corregirlo.
D) Su hijo llego a las tres de la mañana porque se le paso la hora y pensó qué no sería tan grave llegar tan tarde, después de todo, no le paso nada.

2. Señale el punto de discrepancia central entre Juan y Bertha:
A) Si es adecuado cuidar con celo a un hijo, cuando este ya pasó la mayoría de edad.
B) Si es dable molestar con minucias como la hora de llegada a un muchacho que ya trabaja y podría casarse.
C) Si Juan hizo bien al quedarse en vela y esperar a su hijo mayor de edad.
D) Si Juan hizo bien al llamarle la atención a su hijo por haber llegado tarde.

3. El tono que Juan uso con su hijo fue:
A) Increpante   
B) Sarcástico   
C) Mordaz
D) Despectivo

4. Señale la intención de Bertha:
A) Exponer, con argumentos, que Juan no es el buen padre que piensa.
B) Darle a entender a Juan que cierto acto para con su hijo ya no es adecuado.
C) Reclamar una mala actitud de su esposo e indicar que los hijos crecen.
D) Ironizar sobre la edad del hijo de Juan y las actitudes que el último aún mantiene.

lectura I Actividad 1

Queridas estudiantes, con el animo de motivar mas la lectura en ustedes, les propongo estas lecturas las cuales deberán ser leídas y contestadas las preguntas que son de respuesta única y múltiple,  luego de imprimirla deberás adjuntarla en tu folder, con tu comentario propio de la lectura. Esta semana son cuatro actividades.

Los motivos de algunos hombres para desesperarse ante una ruptura amorosa tienen que ver con situaciones vividas en la infancia. Ellos no tuvieron una madre empática con sus necesidades emocionales. Se sintieron rechazados cuando, por desinterés de esta, pasaron a manos de otra persona (abuela, tía, empleada) antes de que cumplieran dos años. No lo recuerdan, pero sus agonías están dentro.
Las primeras etapas del desarrollo emocional están llenas de conflictos y amenazas de desintegración. La relación con la realidad externa todavía no está fuertemente arraigada. El infante necesita suministros de amor de la madre para sentir que existe, hasta que empiece a amarse como la madre lo amó. Su proceso fue cortado por la falta de atención materna. Por eso necesita de una mujer para revivir sus hondas penas y a la vez, ser "feliz" cuando ella demuestra afecto. Y repetición y repetición, hasta que lo inconsciente se haga consciente; y esto es un proceso largo.

1. Señale el argumento central del texto:
A. La madre es la responsable del mal desempeño de los hijos.
B. Las madres empáticas son las que hacen una mejor labor criando hijos y formándolos.
C. Las madres influyen en los triunfos y fracasos de los hijos.
D. El papel de una madre desinteresada hace que los hijos tengan secuelas emocionales.

2. Señale la opción que debilite al texto:

I. Las madres desinteresadas por los hijos, fueron así a causa de las exigencias laborales.
II. Dé una u otra manera los padres influyen de manera negativa en una persona, pero el adulto no puede culparlos. de todo.
III. Un 97 por ciento de los hombres mencionados en el texto, tuvieron unas madres excelentes y atentas con ellos.
A. Solo II  y  III             C. SoloI  y  III
B. Solo III                      D. Solo II

3. Señale el tono del texto:
A. Mordaz                          C. Explicativo
B. Moralista                       D. Sutil

EL DÍA QUE ME VOLVÍ INVISIBLE


 No sé a como estamos. En esta casa no hay calendarios y en mi memoria los hechos están hechos una maraña. Me acuerdo de aquellos calendarios grandes, unos primores, ilustrados con imágenes de los santos, que colgábamos al lado del tocador... pero ya no hay nada de eso, todas las cosas antiguas han ido desapareciendo. Y yo, yo también me fui borrando sin que nadie se diera cuenta. Primero me cambiaron de alcoba, pues la familia creció. Después me pasaron a otra más pequeña aun, acompañada de mis biznietas. Ahora ocupo el desván, el que está en el patio de atrás.  Prometieron cambiarle el vidrio roto de la ventana, pero se les olvido, y todas las noches por allí se cuela un airecito helado que aumenta mis dolores reumáticos.
Desde hace mucho tiempo tenía intenciones de escribir, pero me pasaba semanas buscando un lápiz y, cuando al fin lo encontraba, yo misma volvía a olvidar donde lo había puesto. A mis años, las cosas se pierden fácilmente; claro que es una enfermedad de ellas, de las cosas, porque estoy segura de tenerlas, pero siempre se desaparecen.  La otra tarde caí en cuenta de que mi voz también ha desaparecido.  Cuando les hablo a mis nietos o a mis hijos, no me contestan.  Todos hablan sin mirarme, como si yo no estuviera con ellos escuchando atenta lo que dicen.
A veces intervengo en la conversación, segura de que lo que voy a decirles no se le ha ocurrido a ninguno y les van a servir de mucho mis consejos. Pero no me oyen, no me miran, no me responden. Entonces llena de tristeza, me retiro a mi cuarto antes de terminar de tomar la taza de café. Lo hago así, de pronto, para que comprendan que estoy enojada, para que se den cuenta que me han ofendido y vengan a buscarme y me pidan perdón. Pero nadie viene. El otro día les dije que cuando me muriera entonces si me iban a extrañar. El nieto más pequeño dijo: "¿Y es que estas viva, abuela?..." Les cayó tan en gracia, que no paraban de reír. Tres días estuve llorando en mi cuarto, hasta que una mañana entro uno de los muchachos a sacar unas llantas viejas y ni los buenos días me dio. Fue entonces cuando me convencí de que soy invisible, me paro en medio de la sala para ver si aunque sea estorbo, me miran, pero mi hija sigue barriendo sin tocarme, los niños corren a mí alrededor, de uno a otro lado, sin tropezar conmigo.
Cuando mi yerno se enfermo, tuve la oportunidad de serle útil; le lleve un te especial que yo misma prepare. Se lo puse en la mesita y me senté a esperar que se lo tomara.  Sólo que estaba viendo televisión y ni un parpadeo me indico que se daba cuenta de mi presencia. El té poco a poco se fue enfriando. Mi corazón también.
Un viernes se alborotaron los niños y me vinieron a decir que al día siguiente nos iríamos todo el día de campo. ¡Me puse muy contenta! ¡Hacia tanto tiempo que no salía y menos al campo! El sábado fui la primera en levantarme. Quise arreglar las cosas con calma. Los viejos nos tardamos mucho en hacer cualquier cosa, así que me tome mi tiempo para no retrasarlos. Al rato entraban y salían de la casa corriendo y echaban las bolsas y juguetes al carro. Yo ya estaba lista y muy alegre me pare en el zaguán a esperarlos...
Cuando arrancaron y el auto desapareció envuelto en bullicio, comprendí que yo no estaba invitada, tal vez porque no cabía en el auto o porque mis pasos tan lentos impedirían que todos los demás corretearan a su gusto por el bosque. Sentí clarito como mi corazón se encogió, la barbilla me temblaba como cuando uno no aguanta las ganas de llorar.
Vivo con mi familia y cada día me hago más vieja, pero cosa curiosa, ya no cumplo años. Nadie lo recuerda. Todos están tan ocupados...Yo los entiendo, ellos si hacen cosas importantes. Ríen, gritan, sueñan, lloran, se abrazan, se besan. Y yo no sé a que saben los besos. Antes besuqueaba a los chiquitos; era un gusto enorme el que me daba tenerlos en mis brazos, como si fueran míos. Sentía su piel tiernita y su respiración dulzona muy cerca de mí. La vida nueva se me metía como un soplo y hasta me daba por cantar canciones de cuna que nunca creí recordar. Pero un día mi nieta Laura, que acababa de tener un bebe, dijo que no era bueno que los ancianos besaran a los niños por cuestiones de salud. Ya no me acerque más, no fuera a ser que les pasara algo malo por mis imprudencias. ! Tengo tanto miedo de contagiarlos!
Yo los bendigo a todos y les perdono, porque: ¿Que culpa tienen los pobres de que yo me haya vuelto invisible?
1.       ¿Quién y porque se volvió invisible, a que se debió?
2.       ¿Qué explicación da la abuela al darse cuenta que se convirtió en invisible?
3.       ¿crees que es correcto tratar así a los mayores? ¿Por qué? ¿Cómo tratas tu a tus abuelos?
4.       ¿de todo lo que vivió la abuela que crees tú qué fue lo más triste que vivió en su casa?

5.       ¿Qué mensaje nos da la lectura de hoy?

¿TE MERECE?

                 
Cuentan que había una vez un rey muy apuesto que estaba buscando esposa. Por su palacio pasaron todas las mujeres más hermosas del reino y de otros más lejanos; muchas le ofrecían además de su belleza y encantos, muchas riquezas, pero ninguna lo satisfacía tanto como para convertirse en su reina.
Cierto día, llegó una mendiga al palacio de este rey y con mucha lucha consiguió una audiencia.
"No tengo nada material que ofrecerte, solo puedo darte el gran amor que siento por tí" le dijo al rey: " Sí me permites puedo hacer algo para demostrarte ese amor".
Esto despertó la curiosidad del rey, quién le pidió que dijera que era eso que podía hacer." Pasaré 100 días en tu balcón, sin comer ni beber nada, expuesta a la lluvia, al sereno, al sol y al frío de la noche. Si puedo soportar estos 100 días, entonces me convertirás en tu esposa".
El rey, sorprendido más que conmovido, aceptó el reto. Le dijo: Acepto, si una mujer puede hacer todo esto por mí, es digna de ser mi esposa.
Dicho esto, la mujer comenzó su sacrificio.
Empezaron a pasar los días y la mujer valientemente soportaba las peores tempestades. Muchas veces sentía que desfallecía del hambre y el frío, pero la alentaba imaginarse finalmente al lado de su gran amor.
De vez en cuando el rey asomaba la cara desde la comodidad de su habitación, para verla y le hacía señas de aliento con el pulgar.
Así fue pasando el tiempo, 20 días, 50 días, la gente del reino estaba feliz pues pensaban: ¡Por fin tendremos reina!...90 días.. y el rey continuaba asomando su cabeza de vez en cuando para ver los progresos de la mujer. "Esta mujer es increíble" pensaba para sí mismo, y volvía a darle aliento con señas.
Al fin llego el día 99 y todo el pueblo empezó a reunirse en las afueras del palacio para ver el momento en que aquella mendiga se convertiría en esposa del rey. Fueron contando las horas, a las 12 de la noche de ese día, tendrían reina.
La pobre mujer estaba muy desmejorada; había enflaquecido mucho y contraído enfermedades. Entonces sucedió. A las 11 de la noche del día 100, la valiente mujer se rindió, y decidió retirarse de aquel palacio. Dio una triste mirada al sorprendido rey, y sin decir una palabra se marchó.
¡La gente estaba conmocionada! Nadie podía entender porque aquella valiente mujer se había rendido faltando solo una hora para ver sus sueños convertidos en realidad. Había soportado tanto!
Al llegar a su casa, su padre se había enterado ya de lo sucedido. Le pregunto: ¿Por qué te rendiste a solo instantes de ser la reina?
Y ante su asombro, ella respondió: Estuve 99 días y 23 horas en su balcón, soportando todo tipo de calamidades y no fue capaz de liberarme de ese sacrificio. Me veía padecer y solo me alentaba a continuar, sin mostrar siquiera un poco de piedad ante mi sufrimiento. Esperé todo este tiempo un atisbo de bondad y consideración que nunca llegaron. Entonces entendí: que es una persona tan egoísta, desconsiderada y ciega, que solo piensa en sí misma, y no merecía mi amor!
Cuando ames a alguien y sientas que para mantener a esa persona a tu lado tienes que sufrir, sacrificar tu esencia y hasta rogar...aunque te duela, retírate. Y no tanto porque las cosas se tornen difíciles, sino porque quien no te haga sentir valorado, quien no sea capaz de dar lo mismo que tú, quien no puede establecer el mismo compromiso, la misma entrega...simplemente NO TE MERECE

1.     Luego de leer la lectura estás de acuerdo con el título, ¿Qué otro nombre le pondrías y por qué?
2.     ¿Por qué la humilde mujer quiso realizar tal sacrificio?
3.     ¿crees que si el rey le hubiera mostrado algo más que unas señas, ella hubiera continuado hasta el final? ¿Por qué?
4.     ¿Qué mensaje nos quiere transmitir el autor en el último párrafo de la lectura? Explica
5.     ¿Por qué la joven humilde que hizo el sacrificio espero una hora antes de cumplirse el plazo para retirarse, porque no lo hizo antes si ya se había dado cuenta como era el rey?


LAS DOS MUJERES QUE AMO


Las Dos Mujeres Que Amo Después de 21 años de matrimonio, descubrí una nueva manera de mantener viva la chispa del amor. Desde hace poco había comenzado a salir con otra mujer, en realidad había sido idea de mi esposa.
- "Tú sabes que la amas", me dijo un día, tomándome por sorpresa. "La vida es demasiado corta debes dedicar tiempo".
-"Pero yo te amo a ti- protesté.
-"Lo sé. Pero también la amas a ella". La otra mujer a quien mi esposa quería que yo visitara, era mi madre, quien era viuda desde hacía 19 años, pero las exigencias de mi trabajo y mis 3 hijos hacían que solo la visitara ocasionalmente.
Esa noche la llamé para invitarla a cenar y al cine.
- "¿Qué te ocurre? ¿Estás bien?", me preguntó. Mi madre es el tipo de  mujer que una llamada tarde en la noche o una invitación sorpresiva es  indicio de malas noticias.
-"Creí que sería agradable pasar algún tiempo contigo", le respondí.
-"Los dos solos".  Reflexionó sobre ello un momento. "Me agradaría muchísimo", dijo.
Ese viernes mientras conducía para recogerla después del trabajo, me encontraba algo nervioso, era el nerviosismo que antecede a una cita...  y ¡Por Dios!, cuando llegué a su casa, advertí que ella también estaba muy emocionada con nuestra cita. Me esperaba en la puerta con su abrigo puesto, se había rizado el cabello y usaba el vestido con que celebró su último aniversario de boda, su rostro sonreía e irradiaba luz como un ángel.
- "Le dije a mis amigas que iba a salir con mi hijo y se mostraron muy impresionadas", me comentó mientras subía a mi auto. "No pueden esperar a mañana para escuchar acerca de nuestra velada".
Fuimos a un restaurante no muy elegante, pero sí acogedor, mi madre se aferró a mi brazo como si fuera "La primera dama". Cuando nos sentamos, tuve que leerle el menú. Sus ojos solo veían grandes figuras. Cuando iba por la mitad de las entradas, levanté la vista; mamá estaba sentada al otro lado de la mesa y me miraba. Una sonrisa nostálgica se le delineaba en los labios.
- "Era yo quien leía el menú cuando eras pequeño", me dijo.
-"Entonces es hora de que te relajes y me permitas devolver el favor", respondí. Durante la cena tuvimos una agradable conversación; nada extraordinario, solo ponernos al día con la vida del otro. Hablamos tanto que nos perdimos el cine.
- "Saldré contigo otra vez, pero sólo si me dejas invitar", dijo mi madre cuando la llevé a casa? Asentí.
-"¿Cómo estuvo tu cita?", quiso saber mi esposa cuando llegué aquella noche.
-"Muy agradable... mucho más de lo que imaginé?", contesté. Días más tarde mi madre murió de un infarto masivo, todo fue tan rápido que no pude hacer nada.  Al poco tiempo recibí un sobre con copia de un cheque del restaurante a donde habíamos cenado mi madre y yo y una nota que decía: "La cena la pagué por anticipado, estaba casi segura, de que no podría estar allí, pero igual pagué 2 platos; uno para ti y el otro para tu esposa, jamás podrás entender lo que aquella noche significó para mí? Te amo"
En ese momento comprendí la importancia de decir a tiempo: "TE AMO" y de darles a nuestros seres queridos el espacio que se merecen; nada en la vida será más importante que Dios y tu familia... dales tiempo, porque ellos no pueden esperar.

1.         ¿Por qué la esposa le pide a su esposo que vaya a visitar a su otro amor, quien era de él?
2.         ¿crees que es necesario que nos digan que visitemos a las personas que nos quieren? ¿Por qué?
3.         Describe con tus palabras como fue el este encuentro. Y el segundo encuentro que paso en este y  por que
4.         ¿Qué significa para ti la palabra TE AMO, como la manifiestas?

5.         ¿Cuál es tu apreciación del último párrafo de la lectura?

martes, 16 de septiembre de 2014

EL JUEGO DE AJEDREZ


Era una noche oscura y fría. Daniel bebía un café sentado en su sillón favorito en la sala de su casa.  Su familia dormía y él reflexionaba tantas cosas que perdió la noción del tiempo. Eran las tres de la mañana, llevó su tasa vacía al lavaplatos, y abrió el refrigerador para prepararse un refrigerio. Cuando cerró la puerta vio junto a él a una figura muy conocida, pero en nada preciada. La espectral imagen le arrebató el sueño en un instante y lo miró fijamente y le dijo con voz tenue:
- ¿Sabes bien a que he venido? El asintió con la cabeza y dijo: - Si. Lo sé. Ya es hora. La muerte confundida le preguntó a su víctima. - ¿No vas a llorar? Todos lo hacen, se arrodillan y suplican, juran que serán mejores, ruegan por una oportunidad. ¿Tu por qué no? Temeroso aún y con un nudo en la garganta, Daniel le respondió: - ¿De qué me sirve? Nunca me darás otra oportunidad. Tu solo haces tu trabajo. - Cierto, sólo hago mi trabajo.
- ¿Puedo despedirme de mi familia? cuestionó Daniel con la ligera esperanza de recibir un si. - Tú has dicho que solo hago mi trabajo, yo no decido la hora ni el lugar, mucho menos los detalles. - Lo siento. - No tienes de que disculparte, poca gente piensa en su familia en vida pero al llegar este momento, todos piden lo mismo.
- No lo entiendes - dijo Daniel con tono de reproche - yo perdí a mi padre cuando tenía 15 años, y mi sufrimiento fue grande… pero mi hija menor tiene tan solo 4, déjame decirle que la amo. - Tuviste 4 años pare decírselo, tuviste muchos días libres, muchos cumpleaños, fiestas y momentos en que pudiste decirle a tu hija que la amas. ¿Por qué solo pensaste en tu hija?
- Mi hijo mayor no me creería, y mi esposa, a ella no creo que le interese si la amo o no. No hemos distanciado mucho. Pero mi niña, no hay día que entre yo por la puerta y no esté ahí para recibirme con un beso.
- Deja de hablar ya se hace tarde. - Esta bien.  Sabes, este momento hace que mucha gente haga conciencia de su vida. Lástima que sea demasiado tarde. Salieron ambos al patio; un extraño tren aguardaba en la calle y lo abordaron. - No todo es aburrido en la muerte. No te puedo decir lo que pasará al llegar, pero te propongo que juguemos ajedrez para matar el tiempo.  Con una sonrisa y una lágrima Daniel dijo: Que curioso, creí que no tenias sentido del humor.
El juego inició. Daniel no se calmaba aunque comenzó ganando, consiguió un alfil y un caballo. Pero era obvio que eso no lo alegraba. La muerte le preguntó: ¿A que te dedicabas en vida?
- Soy… es decir, era un simple empleado en una fábrica de calzado. - ¿Obrero? - No. Trabajaba en la administración.
- Ah. Supongo que tú te encargabas de ver si algo faltaba en producto o dinero.
- Si. En parte así era. - No lo entiendo…   ¿No entiendes qué? - Porque ustedes teniendo tantas cosas que hacer se encierran en el trabajo, se olvidan de los sentimientos, no les importan los demás, se vuelven egoístas y violentos para que al visitarlos yo, demuestren ternura, humildad, tristeza, miedo, e incluso lloren. ¿Por qué esperar a que llegue yo, si ya nada pueden hacer? - No lo sé… -En cambio yo, soy como un simple peón, haciendo lo que debo hacer y nada más. Mientras ustedes son dueños de su propia vida, capaces de decidir qué harán con ella, ¿y para qué? Si su peor decisión es desperdiciar su vida.
- Te creí más cruel- comentó Daniel. - Nada es lo que parece.
El silencio reinó por unos instantes mientras Daniel ponía en jaque a la muerte.
- Dime ¿qué pensabas cuando te casaste?
- Pensaba en ser feliz, en formar una linda familia, en formar parte de la sociedad. - ¿Y lo lograste?
-¿Es broma verdad? Me encontraste solo en mi cocina, durante la madrugada, y te pedí despedirme de mi hija. Es obvio que no lo hice. Si hubiese mostrado más amor a mi familia la despedida no hubiera sido necesaria. Ya las lágrimas se habían secado del rostro de Daniel y de pronto exclamó suavemente:
- ¡Jaque Mate!
La muerte sonrió y dijo: - ¡Felicidades! Suspiró Daniel y respondió: - Es una pena que no sirva de nada. No me importaba ganar de todos modos ya estoy aquí. Un simple juego de ajedrez no aleja mi mente de mi familia, de mis hijos, mi esposa.  Las lágrimas brotaron de nuevo en el rostro de Daniel quien se cubrió el rostro con ambas manos.  Y mientras el sollozaba la muerte exclamó: ¡Llegamos!
Daniel intentó calmarse y al abrir los ojos estaba de nuevo en su viejo sillón, se secó las lágrimas... eran las 6 con 45 de la mañana. Y en lugar de gritar ¡Estoy vivo! Como lo haría cualquier otro, salió al patio y dijo con voz tenue: - Gracias.
Caminó de vuelta a su casa, entró a la habitación de su hija, la tomó en brazos y fue donde su hijo dormía, le hizo cosquillas en los pies, y le dijo: ¡Hijo, despierta es domingo! - ¿Me despiertas para decirnos que es domingo?
- No hijo, los desperté para decirles que los amo.
No esperes jugar ajedrez o lo que sea, mucho menos pedir más tiempo; hazlo ahora y dile a tus seres queridos que los amas…
  
1.             Describe las situaciones que explica Daniel a la muerte antes de que se lo lleve
2.            ¿Qué nos quiere decir el autor con la expresión: No esperes jugar ajedrez o lo que sea, mucho menos pedir más tiempo; hazlo ahora y dile a tus seres queridos que los amas…
3.            ¿será verdad que por preocuparnos en las cosas de casa, estudio, trabajo nos olvidamos de los sentimientos, nos volvemos egoístas, violentos, etc? ¿por qué?. Sustenta tu respuesta
4.      Si tu recibieras la visita de la muerte cual sería tu actitud, también rogarías por tu vida pidiendo una oportunidad más o la “aceptarías” o tratarías de burlarla.  Porque, no estás preparada o es la vida muy importante para ti

5.             El tiempo en tu vida que significa, dedicas tiempo exacto para todos o solo para algunas cosas

LA FLOR


Mi madre siempre contaba una historia así:
Había una joven muy rica, que tenía de todo, un marido maravilloso, hijos perfectos, un empleo que le daba muchísimo bien, una familia unida.
Lo extraño es que ella no conseguía conciliar todo eso, el trabajo y los quehaceres le ocupaban todo el tiempo y su vida siempre estaba deficitaria en algún área.
Si el trabajo le consumía mucho tiempo, ella lo quitaba de los hijos, si surgían problemas, ella dejaba de lado al marido... Y así, las personas que ella amaba eran siempre dejadas para después.
Hasta que un día, su padre, un hombre muy sabio, le dio un regalo: Una flor carísima y rarísima, de la cual sólo había un ejemplar en todo el mundo. Y le dijo:
- Hija, esta flor te va a ayudar mucho, ¡más de lo que te imaginas! Tan sólo tendrás que regarla y podarla de vez en cuando, y a veces conversar un poco con ella, y ella te dará a cambio ese perfume maravilloso y esas maravillosas flores.
La joven quedó muy emocionada, a fin de cuentas, la flor era de una belleza sin igual.
Pero el tiempo fue pasando, los problemas surgieron, el trabajo consumía todo su tiempo, y su vida, que continuaba confusa, no le permitía cuidar de la flor.  Ella llegaba a casa, miraba la flor y las flores todavía estaban allá, no mostraban señal de flaqueza o muerte, apenas estaban allá, lindas, perfumadas.
Entonces ella pasaba de largo.
Hasta que un día, sin más ni menos, la flor murió. Ella llegó a casa ¡y se llevó un susto! Estaba completamente muerta, sus raíz estaba reseca, sus flores caídas y sus hojas amarillas.
La joven lloró mucho, y contó a su padre lo que había ocurrido. Su padre entonces respondió:
- Yo ya me imaginaba que eso ocurriría, y no te puedo dar otra flor, porque no existe otra flor igual a esa, ella era única, al igual que tus hijos, tu marido y tu familia. Todos son bendiciones que el Señor te dio, pero tú tienes que aprender a regarlos, podarlos y darles atención, pues al igual que la flor, los sentimientos también mueren.
Te acostumbraste a ver la flor siempre allí, siempre florida, siempre perfumada, y te olvidaste de cuidarla.
¡Cuida a las personas que amas!
Acuérdate siempre de la flor, pues las Bendiciones del Señor son como ella, Él nos da, pero nosotros tenemos que cuidar.
                   
1.      ¿Cuál fue la intención que tuvo el padre al regalarle la flor a su hija?
2.     ¿Qué significaba el tiempo para la joven?
3.     ¿Por qué la flor se murió, explica tu respuesta?
4.     ¿Qué es lo que más tienes que cuidar y por qué?

5.     ¿Cuál es el mensaje que el autor quiere darnos en la lectura?. Explica tu respuesta 

TODOS SOMOS IGUALES



El que es bueno, de la bondad que atesora en el corazón produce el bien; pero el que es malo, de su maldad produce el mal, porque de lo que abunda en el corazón habla la boca. Lucas 6,45
En un pueblo, gobernaba un hombre famoso por sus abusos de autoridad y su desprecio hacia las clases más humildes. Con frecuencia hacía fiestas a las cuales invitaba sólo a la gente más acaudalada de la localidad, gente como él, indiferente a las necesidades de los pobres.
Un día llegó al pueblo el señor Freyman, un empresario muy rico, quien pensaba instalar una gran industria en el lugar, lo cual significaría un gran progreso y fuentes de trabajo para los lugareños. El mismo gobernador fue a recibir al empresario, le ofreció su casa y lo acompañó a ver el terreno.
Esa noche, ofreció una fiesta en su honor, en donde, como siempre se reuniría la crema y nata del pueblo.
Estaban en medio del banquete, cuando a un mozo se le cayó una bandeja con vasos, haciéndose trizas en el suelo, justo enfrente del gobernador y su invitado.
¡Pero que no te fijas imbécil?- le gritó el gobernador al muchacho, quien muy asustado procedió a recoger los vidrios. El hombre no cesó de insultarlo, hasta que terminó de recoger todo. El empresario se quedó observando la escena, muy conmovida y también indignada, pero lo disimuló.
Después que se hubo ido el muchacho, se dirigió al gobernador: - Señor gobernador...¿le puedo hacer una pregunta? - Por supuesto, mi estimado señor Freyman- respondió zalamero el gobernador. - ¿Si esos vasos se me hubieran caído a mí, qué hubiera pasado?, ¿me habría usted insultado como lo hizo con ese pobre muchacho?
El gobernador se turbó por la pregunta y respondió: - ¡Por supuesto que no señor Freyman, cómo cree! - ¿Y por qué no? También se hubieran roto los vasos. - Pero no es lo mismo...¡cómo iba yo a ofenderlo a usted! - Ah, ¿y por qué a ese muchacho sí? - Pues... es solo un indio... un desarrapado... - Es un ser humano, igual que usted, igual que yo- declaró firmemente el empresario. - ¡Pero cómo se va a comparar con nosotros ese pobre diablo! - Ese pobre diablo, como usted lo llama, merece respeto y consideración. El hecho de no poseer bienes, no hace a un hombre menos merecedor de estos.
Las palabras del empresario se escuchaban claras y decididas en el comedor, pues todos los invitados se habían quedado en silencio, asombrados, viendo como el gobernador, era avergonzado por su invitado de honor.
¡Ah que señor Freyman, me resultó usted predicador!- trató de bromear el gobernador, para disimular su malestar.
No, señor gobernador, estoy hablando muy en serio.
Bueno, pero no es para tanto jeje...
Pues quiero que sepa, que yo fuí como ese muchacho, yo servía mesas en la taberna de mi pueblo...
¿Pero cómo es posible?
Así es, señor gobernador. Yo vengo de una familia muy pobre, empecé a trabajar desde los doce años. No le voy a contar mi historia, pero quiero que sepa que porque he estado abajo, sé cómo se siente ser tratado como usted ha tratado a ese muchacho. Y una cosa le aseguro, yo soy la misma persona, ahora que tengo dinero, que cuando no lo tenía y eso, gracias a los valores que me enseñó mi madre. Porque el hombre no vale por lo que tiene, sino por lo que es. Hay muchos ricos que no valen nada y muchos pobres que valen oro. Todos nacemos igual: sin nada y todos morimos igual: sin nada. No importa si en este mundo fuimos ricos o pobres, cuando lo dejamos, nada material nos llevamos. Todos nos hemos de presentar ante Dios de la misma manera, para El somos todos iguales, así que si para El somos todos iguales, ¿quiénes somos nosotros para hacer diferencias?
El empresario terminó de hablar y calmadamente prosiguió con su cena, dejando a todos consternados y pensativos, especialmente el gobernador, quien esa noche había recibido la lección más grande de su vida.
Porque no hay acepción de personas para con Dios. Romanos 2,11

1.    ¿crees que actualmente en nuestra sociedad nos encontramos con personas como el gobernador? ¿Por qué crees que actúan así?
2.          ¿ Qué nos quiere dar a entender el autor al decir el Señor Freyman: el hombre no vale por lo que tiene, sino por lo que es. Hay muchos ricos que no valen nada y muchos pobres que valen oro. Todos nacemos igual: sin nada y todos morimos igual. Explica tu respuesta.
3.            ¿Qué valor descubres en la lectura, porque y como lo aplicarías en tu vida diaria?
4.         ¿Qué es más importante para los jóvenes de hoy el cómo te ven o lo que tienes en realidad?

5.    Si tu fueras el gobernador cual hubiera sido tu actitud luego de lo que le conto el empresario?. Explica tu respuesta

EL PADRE Y EL ÁGUILA



En su corazón de Padre, reinaba la alegría y los sentimientos de amor que brotaban a raudales dentro de su ser. Un buen día, le dieron ganas de entrar en contacto con la naturaleza, pues a partir del nacimiento de su bebé todo lo veía hermoso y aún el ruido de una hoja al caer, le sonaba a notas musicales.
Así fue que decidió ir a un bosque; quería oír el canto de los pájaros y disfrutar de la naturaleza. Caminaba plácidamente respirando la humedad que hay en estos lugares, cuando de repente vio posada en una rama a un águila, el cual desde el primer instante lo sorprendió por la belleza de su plumaje.
El águila también había tenido la alegría de recibir a sus polluelos y tenía como meta llegar hasta el río más cercano, capturar un pez y llevarlo a su nido como alimento; pues tenía la gran responsabilidad de criar y formar a sus aguiluchos, y enseñarles a enfrentar los retos que la vida ofrece, era su único objetivo.
El águila al notar la presencia de Alberto lo miró fijamente y le preguntó:
-¿A dónde te diriges buen hombre?, veo en tus ojos la alegría.
Alberto le contestó: - Es que ha nacido mi hijo y he venido al bosque a disfrutar, pero me siento un poco confundido.
El águila insistió:
- Oye, ¿y qué piensas hacer con tu hijo?
Alberto le contestó: Ah, pues ahora y desde ahora, siempre lo voy a proteger, le daré de comer y jamás permitiré que pase frío. Yo me encargaré de que tenga todo lo que necesite, y día con día yo seré quien lo cubra de las inclemencias del tiempo; lo defenderé de los enemigos que pueda tener y nunca dejaré que pase situaciones difíciles. No permitiré que mi hijo pase necesidades como yo las pasé, nunca dejaré que eso suceda, porque para eso estoy aquí, para que él nunca se esfuerce por nada.
Y para finalizar agregó:
- Yo como su Padre, seré fuerte como un oso, y con la potencia de mis brazos lo rodearé, lo abrazaré y nunca dejaré que nada ni nadie lo perturbe.
El águila no salía de su asombro, atónita lo escuchaba y no daba crédito a lo que había oído.
Entonces, respirando muy hondo y sacudiendo su enorme plumaje, lo miró fijamente y le dijo:
- Escúchame bien buen hombre. Cuando recibí el mandato de la naturaleza para empollar a mis hijos, también recibí el mandato de construir mi nido. Un nido confortable, seguro, a buen resguardo de los depredadores, pero también le he puesto ramas con muchas espinas ¿y sabes por qué?, porque aún cuando estas espinas están cubiertas por plumas, algún día, cuando mis polluelos hayan emplumado y sean fuertes para volar, haré desaparecer todo este confort, y ellos ya no podrán habitar sobre las espinas, eso les obligará a construir su propio nido. Todo el valle será para ellos, siempre y cuando realicen su propio esfuerzo y aspiración para conquistarlo, con todo y sus montañas, sus ríos llenos de peces y praderas llenas de conejos.
- Si yo los abrazara como un oso, reprimiría sus aspiraciones y deseos de ser ellos mismos, destruiría irremediablemente su individualidad y haría de ellos individuos indolentes, sin ánimo de luchar, ni alegría de vivir. Tarde que temprano lloraría mi error, pues ver a mis aguiluchos convertidos en ridículos representantes de su especie me llenaría de remordimiento y gran vergüenza, pues tendría que cosechar la impertinencia de mis actos, viendo a mi decencia imposibilitada para tener sus propios triunfos, fracasos y errores, porque yo quise resolver todos sus problemas.
- Yo, amigo mío,- dijo el águila, - podría jurarte que después de Dios, he de amar a mis hijos por sobre todas las cosas, pero también he de prometer que nunca seré su cómplice en la superficialidad de su inmadurez, he de entender su juventud, pero no participaré de sus excesos, me he de esmerar en conocer sus cualidades, pero también sus defectos y nunca permitiré que abusen de mí en aras de este amor que les profeso.
El águila calló y Alberto no supo qué decir, pues seguía confundido, y mientras entraba en una profunda reflexión, ésta, con gran majestuosidad levantó el vuelo y se perdió en el horizonte. Alberto empezó a caminar mientras miraba fijamente el follaje seco disperso en el suelo, sólo pensaba en lo equivocado que estaba y el terrible error que iba a cometer al darle a su hijo el abrazo del oso. Reconfortado, siguió caminando. Sólo pensaba en llegar a casa, con amor abrazar a su bebé, pensando que abrazarlo sólo sería por segundos, ya que el pequeño empezaba a tener la necesidad de su propia libertad para mover piernas y brazos, sin que ningún oso protector se lo impidiera.
A partir de ese día Alberto empezó a prepararse para ser el mejor de los Padres.
La vida solo puede ser comprendida mirando hacia atrás, pero solo puede ser vivida, mirando hacia adelante.

1.         ¿Cuál es el dialogo que se da entre el águila y Alberto? ¿Por qué?
2.         A través de la lectura que nos quiere dar a entender el autor y por qué?
3.         Explica el significado de la siguiente frase: La vida solo puede ser comprendida mirando hacia atrás, pero solo puede ser vivida, mirando hacia adelante
4.         ¿Qué lección le enseño el águila a Alberto?
5.         ¿crees que los padres de hoy actúan como Alberto o como el águila? ¿Por qué?